Estrógeno.
Mineros y su afición tuvieron otro de esos encuentros mágicos, de nuevo bebieron del mismo vino en la búsqueda de algo que se veía difícil, muy difícil.
Con un equipo mermado por las lesiones y otras yerbas, la Furia Gris volvió a ser Furia; la rienda del Mano y compañía por fin se manifestó y los muchachos ampliaron su límite, jugaron sin miedo, con hambre de triunfo y con valor, con mucho valor.
El parque que aun no logra ese sabor estrecho, registró sus mejores entradas desde la final contra Delicias en el 2005, por fin se llenó la gente mostró que la lámpara aun es nuestra, pero hay que frotarla.
Fue para quien supo entenderla una lección cívica: “No es por falta de pasión que no acudimos al estadio, compréndanlo”.
Juárez peleó pero le faltó corazón, la dirección fue tipo grandes ligas, con frialdad, pero esta, muy desacertada. No comparto el haber abierto con Perea cuando Barrón ya le había dado sendas victorias, no comparto tampoco la idea de sostener, ahora si, a Barrón mas que por 6 entradas, por 6 anotaciones. Su bulpen se quedó apenas tibio.
Pero eso ha caracterizado a los equipos de la frontera en los últimos tiempos, como ganan pierden y ni quien sufra.
Su tibieza contrastó con la pasión envolvente a que fueron sometidos viernes y sábado con las manifestaciones espontáneas de una porra que exigía eso: pasión y entrega.
Librar este escollo ha significado oxigeno puro para el equipo Parral, haber quedado en el intento en esta etapa del play off hubiera acentuado el sabor a cobre. Así que no había opción para el Mano, pelear heroicamente y además, ganar. Pero Muñoz es un hombre al que estos escenarios le sientan bien, la consigna era clara: Habría que ir con el pecho por delante y vieja el que se raje, había que tomar la plaza asi fuera a costa de nuestra piel. Eso quedaba muy claro.
Tanto Sabóri como Humberto brillaron con luz propia y no necesitaron ayuda para aterrizar a unos Indios que no habían visto efervescer el estadio Parral.
Por otra parte, aunque quisiera hablar solo de la alegría que nos inundó sábado y Domingo ,eso quedó atrás y hay que pensar en el ogro de enfrente. Un rival amorfo que aunque ha liderado el rol casi de punta punta no ha logrado conectar con su afición que realizó paupérrimas entradas al Almanza.
Para bien de casi todos, no olvidemos a Juárez, Mineros visitará este viernes a Dorados en la capital, la patria se ha salvado. La entrada está garantizada. La Chispa , aseguro fue un aficionado feliz mas el sábado cuando cayó el ultimo out.
Ellos siguen pensando que somos un rival de bandera, cómodo y llenador del parque. Después de todo las estadísticas nos dan un numero de derrotas en la capital ya escandaloso.
Y aunque en el terreno son solo 9, sabemos que Dorados goza de la coquetería de la dirigencia de la AEB y mas. Razón extra para mostrarles lo que se puede hacer cuando hay estrógeno, cuando hay hambre de agradar a la afición que acudiremos en masa, para enseñarles una vez mas, que el dinero compra pitcheres pero no la fidelidad del aficionado.
Seguiremos hablando del asunto.
GRAFITI.
Los Parralenses somos Chihuahuenses por extensión, pero ¿por que un diario capitalino se empeña en ignorar que tanto José Ángel Rivera y Carlos “catito” Muñoz son nacidos, formados y avecindados aquí en Parral?
La envidia es un pecado capital….