Sufrir, me tocò a mi...
La Historia nos persigue.
Dicen que quien no aprende de la historia está condenado a repetirla, y dicen también que si una tragedia se repite varias veces, deja de ser vista como tal y empezamos a verla como cosa...mmm normal.
En los 70s, (71 creo) Parral tuvo un día similar al del viernes pasado. Solo que aquella ocasión fue ante Cuauhtemoc y la diferencia eran 9 carreras. El ciclo se repitió en 1974, esta vez fue ante los Dorados, en aquella ocasión le costó el puesto al Médico Armenta y a todos los importados. (aclaro que puedo pecar de impreciso) Todavía la historia reciente registra una vez mas, hace algunos 7 años, Parral estaba a punto de ganar el domingo por la mañana en la capital por una amplísima ventaja cuando una rola brava se le fue al segunda base (Arturo Armenta) y desencadenó una ofensiva Dorada que nos dejó en el terreno.
Lo ocurrido el viernes por la noche, fue una manifestación a gritos de lo que veníamos temiendo hace tiempo. Una ausencia total de responsabilidad del titulo que llevan varios jugadores dentro del equipo Mineros: Lanzadores.
Algunos de ellos quienes se ostentan como tales y que hace un año eran abridores hoy deambulan por la angosta banqueta del fracaso.
No acabo a discernir con claridad que nos ocurrió tanto a aficionados como a directivos y a medios que hemos ingenuamente creído que el equipo es mas competitivo de lo que en realidad es.
Lo dijimos la semana pasada: No hay pitcheo de relevo y no hay poder ofensivo. ¿Tons?
Mas allá de lo que ahora resulta obvio, están las posibles soluciones; Ahí es donde el zapato aprieta mas. Ya todos sabemos las carencias que tenemos, la cosa es ¿como remediarlas?
Para muchos resulta claro que debe- del verbo forzosamente- haber bajas del equipo hoy mismo. Para cuando ustedes estén leyendo esta nota, el comité debe tener varios uniformes ya lavados y devueltos. Pero eso solo es la mitad del enredo. ¿Con quien los cubriremos?
Si en la regional no se dio juego a material elegible, ahora ¿de quien echar mano, que estè al nivel del estatal?
Y las dudas siguen: ¿Que esperar de la presente temporada?
Vayamos a lo posible: Urge un coach, La encuesta realizada aquí mismo demuestra una copiosa respuesta : mas de 120 personas nos han hecho el favor de participar y se manifiestan claramente por ese “mago” que haga trabajar a los pitcheres o que les de las gracias.
Urge quien valore la condición actual de Jaso de González y de Cruz, un tirón no debe tardar mas de tres semanas en rehabilitación, lo están haciendo? Insisto: si Jaso no esta al cien, ¿para que exponerlo? ¿Por que no darlo de baja hasta que lo esté y dar de alta un buen lanzador, si es que lo hubiera elegible?
Por otro lado, en el tercero de la serie se repitió la historia de tener corriendo de emergente a un lanzador, nada menos que a Sabòry nuestro primer abridor. No hay en la banca alguien mas que lo haga?
Es necesario también un receptor. Güereca con su inquebrantable voluntad ha estado recibiendo en los tres juegos pero no está ya para esos trotes; aquí es donde surge la pregunta: para que convocar a Efrén Armendáriz si no se le da juego? Si el fue el campeón bateador de la regional, ¿por que no es al menos el bateador designado y en cambio si se alinea a Carlos G. Rivera que originalmente ni seleccionado estuvo? No dudo de su capacidad pero, ¿donde está la congruencia? ¿para que sirven los números entonces?
Los anteriores son solo algunos de los puntos negros del desempeño del equipo. Que pena que tuviera que abuchearlos la afición- no recuerdo que ocurriera antes- para despertar la voluntad y la vergüenza deportiva de algunos y se pusieran a jugar béisbol.
Seguramente esto dará mucho de que hablar durante la semana, lo importante es no perder el objetivo, no dejarse engañar con haber conseguido la serie, el cierre del rol regular y los play offs son muy distintos y actualmente no estamos preparados para ninguna de ambas cosas.
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